Heat es una lámpara colgante sorprendente y única porque su elaboración es totalmente artesanal y eso hace que no haya dos lámparas Heat iguales, sería imposible conseguir que la forma de la malla de latón que da forma a esta magnífica luminaria mostrara los mismos pliegues en dos mallas distintas... Sí, has leído bien, Heat es una lámpara de latón y la culpable de su existencia es la diseñadora sueca Johanna Forsberg, quien confiesa que lo más la inspira y emociona es realizar esculturas a partir de mallas de latón.
Objetivamente, Heat es como una nube de latón que emite luz cálida (aunque eso dependerá en gran medida del tipo de bombilla que utilices), esa nube pretende emular, en un sentido abstracto y sólo cuando está encendida, una bola de fuego; se trata sin duda de una lámpara muy particular y de un diseño fuera de lo común, uno arquitectónico y de inspiración natural: Heat es de esas lámparas que transforman las habitaciones que iluminan, de esas que atraen las miradas y sorprenden por su originalidad y por lo sugerentes que resultan cuando la luz, a modo de fuego, emana de ellas.
Además, Heat es un proyecto que va más allá del interiorismo, para dar forma a sus lámparas Johanna Forsberg ha contado con una asociación que trabaja con gentes en riesgo de exclusión social y les da la oportunidad de ponerse manos al latón y modelar sus lámparas como medio de vida y, por encima de todo, de creatividad e integración. ¿Se puede pedir más a una lámpara? lo cierto es que no, por eso sumamos este nuevo y solidario diseño a los que, en proyectos similares, presentó Álvaro Catalán de Ocón años atrás en Milán -sus PET Lamps- y que son a día de hoy no sólo proyectos con pasado sino también con mucho futuro.
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