Tom Dixon no se ha perdido la Milan Design Week de 2017 y, entre las piezas que ha presentado, destaca una, la que ha creado de la mano de la firma de whisky escocés Johnnie Walker Blue Label.
Se trata de un conjunto de accesorios pensados por y para la botella de Johnnie Walker Blue Label desde la óptica del diseñado británico de Dixon, que está a medio camino entre la artesanía y la vanguardia. El conjunto -Johnnie Walker Blue Label Capsule Series- está formado por una botella de whisky con su caja a medida, la cubitera a juego y el posavasos, ha sido presentado en Milán pero no se comercializará hasta el próximo mes de octubre ¿su precio? unos 212 euros.
Este diseño, que es la segunda colaboración de Tom Dixon con Johnnie Walker puesto que ya se presentaron juntos en Milán el pasado año, es muy Dixon y muy Walker porque no son pocas las cosas que unen a ambas firmas: su excelencia en lo artesanal es, probablemente, lo más importante, pero hay también aspectos que pueden parecer menos y resultan ser esenciales ¿un ejemplo? el cobre.
Para una firma centenaria de whisky escocés, el cobre forma parte de su historia y de la artesanía no sólo de su proceso de destilado sino también de los alambiques en los que éste sucede y para Dixon el cobre es un material fetiche que utiliza de forma recurrente en sus diseños.
Con ese punto de partida, y la certeza por parte de ambas firmas de que la artesanía no sólo no está reñida con la vanguardia sino de que además sólo las firmas que consiguen cierta contemporaneidad en sus propuestas avanzan y perviven, el diseño de Dixon sólo podía ser el que es, un trabajo detallado y minucioso en cobre que hace gala de la historia de Johnnie Walker Blue Label.
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