Había encontrado el lugar perfecto en el que proteger sus veranos atlánticos, los paseos entre mimosas y aquellos inviernos lluviosos de castañas y libros de pensar. Se había hecho mayor sin darse ni cuenta y necesitaba recordárselo para seguir creciendo. Por eso la había escogido a ella, una enorme caja de recuerdos bonitos, en la que guardaría lo que fue, lo que sería mañana, lo que aprendió a ser.
CAJAS. Pequeñas, rectangulares, diáfanas, de colores y de todas esas cosas que necesitas guardar a buen recaudo para poder mirar de vez en cuando y sonreír. Ellas son otro nuevo ejemplo de lo que Philipp Schöpfer y Daniel Klapsing entienden por diseño moderno y funcional: madera de roble, acero y todos los usos que tu imaginación sea capaz de procesar (un estuche para colorear silencios, un arca para pañuelos de despedidas o una mesa para los mejores brindis en compañía, #loquesurja). Estos jóvenes alemanes se conocieron en la prestigiosa Bauhaus-University Weimar, donde estudiaban diseño, y desde entonces no han dejado de crear. Muestra de ello es 45KILO, su cuartel general de diseño e ideas molonas, y –más recientemente- MY KILO, una firma de mobiliario actual, práctico y (por qué negarlo) con un toque nórdico muy cool.
***Colocó delicadamente la tabla de madera sobre sus recuerdos, la situó al lado de su cama a modo de nueva mesita de noche y apagó la luz. Tocaba salir a buscar nuevas historias que guardar en la nueva KILO que recibiría en unos días. Y así seguir creciendo.***
Bread box (dimensiones: 35 x 22 x 15,5 cm.) – 99 euros.
Big box (dimensiones 65 x 42 x 36 cm.) – 499 euros.
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