Póngase el acento en la estética vintage rozando apenas lo retro, con cuidado de no despertar la pasión que destila gracias al encanto que contiene; añada unas gotas de romanticismo para crear magia en el ambiente, elija el estilo francés como la mejor base para la mezcla y voilá: la colección Charme de Portobello Street compuesta por sillones. cómodas, sinfonieres y vitrinas i-de-a-les.
Los acabados envejecidos gracias al decoupage, la pátina en blanco roto, el gris visón, la el aire vetusto que se imprime a la madera natural, los detalles de carteles publicitarios antiguos en los frontales de las grandes cajoneras, los tiradores de latón y los escritos en caligrafía a mano alzada que lucen alguno de sus muebles, convierten cada una de las piezas de la colección en elementos inspiradores y de rabiosa actualidad, y es que lo vintage, se ha consolidado desde hace un par de años como tendencia decorativa y parece que se quedará una buena temporada. Y mira, nos encanta ese toque justo de chic urbano que se le puede dar a las casas gracias al vintage.
Eso sí, la clave para que estas piezas se conviertan en el centro de atención, cobren el protagonismo justo y no saturen las estancias es el menos es más. Y la armonía como ley inmutable y todopoderosa. Y la mezcla con piezas super actuales y complementos ultramodernos y de diseño. Mezcla sin miedo, sí, mezcla, pero no seas estridente. Eso no, por favor. Be loff.it