Acaba de comenzar el verano y probablemente te encuentres entre los que todavía no tienen la suerte de tener las vacaciones a la vista. Continúan las jornadas laborales que cada vez nos resultan más largas debido al calor. Por eso, el mejor momento del día, después del ansiado disfrute de las terrazas que ya inundan toda la ciudad, es en el que llegamos a casa, nos sentamos y nos alcanza un soplo de aire fresco.
Este aire llega directo desde Suiza, gracias a la firma Stadler Form, que ha conseguido aunar calidad y vanguardia en tres diseños exclusivos y funcionales que otorgarán un toque de estilo a cualquier estancia de la casa.
El modelo OTTO (150 euros) destaca por su aspecto retro y está realizado en madera. Tiene tres velocidades y sus patas regulables permitirán que encaje en cualquier rincón. Es el sustituto perfecto de un aparato de aire acondicionado ya que en comparación a los 1000 w que suelen consumir, el ventilador OTTO contribuye a proteger el medio ambiente con un consumo de solo 45 w.
Si prefieres un ventilador más acorde con una decoración minimalista, elige entre el modelo Q (160 euros) en acero inoxidable, que funciona de manera silenciosa y tiene un diseño muy depurado. O bien el ventilador Charly (90 euros), pensado para espacios más reducidos y con tres posiciones.