Dicen que la soledad no elegida acecha en otoño. Las tardes grises son las que despiertan ese eco interno y a veces lo hacen insoportable. Cuentan que hay personas que encienden un fuego en su chimenea y miran las llamas arder, tratando de quemar los recuerdos que atacan. Suplican que las lágrimas se evaporen a su calor.
Dicen que, a veces, el calor de la lumbre se siente como abrazo. Que el sofá y la mantita hacen mucho por curar almas en pena, pero que no hay nada como sentir esa calidez de la estufa a leña, que envuelve.
Dicen que si te sientas frente al fuego del hogar, mucho tiempo, y meditas y logras disolver ese nudo que te lastima, brotan los “¡basta, hasta aquí!” que necesitas decirte. Y, hay veces, que dan una sabiduría tan grande que, minuto a minuto, las brasas aclaran la mente.
También dicen que los braseros, a veces, provocan besos de pasión, de esos que despiertan almas y sacuden miedos. Y que así es como se escriben las historias. Algunas se borran, es verdad, pero otras, simplemente se hacen más grandes.
Dicen que si haces la travesura de subirte a los hombros de la nostalgia, llegas a los campamentos de tu infancia. Y que ése es un buen momento para calentar unas nubes a las llamas de un hogar. Y mientras ese aroma invade el ambiente, vuelven a surgir esas anécdotas fantásticas. Recomiendan, también tener cerca amigos, hijos o nietos para que te escuchen y enriquezcas las tuyas con las de ellos. Esto, dicen, también funciona si tuestas unas castañas para acompañar la taza calentita de café (o té).
Dicen que las chimeneas son mágicas. Que quien posee una tiene algo sublime que cambia el ambiente. Que hay cierto hechizo en encender el fuego y calentar la casa.
Y dicen que tienes que elegir una que te guste mucho, porque gracias a ella vas a vivir momentos que te marcarán por siempre. Así que... si lo dicen por algo será y por eso mismo, aquí te traemos nuestra selección de hogares, chimeneas y estufas para cuando el frío ataque y el calor del fuego se haga necesario.
Galería de imágenes
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1
Ella es libre. Un punto intermedio entre el diseño clásico y moderno. Y va de una lado al otro con estilo. También ostenta libertad de movimiento, aún cuando la posas sobre el pedestal. Gira hacia un lado para el otro sin problema. Es segura, además. Y aunque esté apagada es bella. Y la Globe está hecha en Suecia.
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2
Es como una actitud poética. Una sutileza para colgar en la pared creada por Alessandro Canepa para Caleido. La A4 es una biochimenea liviana, con un diseño que simula ser como una hoja de papel que se dobla formando un rincón para que la llama nazca. Está realizada en acero de carbono pintada de negro con polvos epóxidicos. Es como una hoguera abierta. Un objeto que no necesita instalación de tuberías. Y además funciona con energía renovable.
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3
Es una chimenea de gas de 4 metros de largo. Sí, es un elemento de decoración para grandes espacios. El ambiente cambia tan radicalmente con su sutileza que no deja de enamorar. Está protegida por cristales a ambos lados para que su estética sea disfrutada desde casi todos los ángulos y viene con una app para móviles que la hace aún más sorprendente.
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4
Así, orgánicamente sus líneas fluyen dibujando un contorno poco tradicional para una chimenea. Su diseño tiene mucha fuerza y carácter, pero desprende una suavidad que emociona. Suspendida y etérea , su boca da protagonismo absoluto a las llamas que nacen de una placa de acero cortada al láser. La Drop es una belleza calórica creada por Massimo Iosa Ghini para Antrax.
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5
Un hogar central para crear ambientes llenos de encanto y momentos cálidos a su alrededor. Su cuerpo principal está sostenido por un pedestal fijado al suelo. Puede funcionar con gas o madera y viene en negro mate, gris o con un acabado encerado. La Magmafocus de Focus es un objeto de deseo, es un punto de atención para exhibir y disfrutar.
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6
Surgió de la idea de crear un rincón cálido para baños. Una especie de elemento más emocional entre tanto mármol. Pero la creatividad se expandió a todos los ambientes creando una colección de chimeneas de bioethanol (biocombustible) y a leña de 63 a 144 cm. Y se multiplican las opciones de decoración con acabados que van desde un rústico óxido hasta el más elegante de los camuflajes con el material que la rodea.
