Arquitectura

The Krane: un apartamento de lujo en una grúa del puerto

The Krane recupera una estructura industrial del puerto para crear una experiencia única que realmente merece la pena.

Coger un elemento arquitectónico significativo y convertirlo en una espacio único es de esas acciones complejas que crean experiencias significativas. Sin más. La última grúa de carbón del puerto de Nordhavn, en Copenhague, podría haber desaparecido antes de que interviniera el empresario Klaus Kastjerg con una visión, la de conservarla y convertirla en un elemento significativo con un valor nuevo, propio y excepcional, un apartamento de lujo en una antigua grúa de carbón del puerto: The Krane.

Gracias a esta visión no sólo se ha conservado un elemento identificativo de la historia del puerto si no que renace con un significado y una identidad única gracias a la colaboración con el arquitecto Mads Møller del estudio Arcgency.

Pasado, presente y futuro se fusionan en los cuatro niveles de esta grúa para crear una experiencia inmersiva en la que cuentan todas las sensaciones, la experiencia completa rehabilitando las estructuras originales de la torre e incluyendo en su interior cuatro espacios. La planta baja, con una recepción, la primera planta con una caja de cristal en la que se encuentra una excepcional sala de reuniones, una primera planta convertida en un delicioso y elegante spa, y la sala de control, la más alta, con un pequeño apartamento de 50 metros cuadrados en los que se encuentran una habitación, salón y una terraza.

Todo se ha hecho a mano, desde la rehabilitación hasta los muebles del interior, a medida para este espacio único y para la experiencia, seleccionando las más destacada empresas danesas en calidad para crear una experiencia singular de lujo basada en el concepto danés de stemning (atmósfera).

Acero, madera, piedra y cuero se utilizan para decorar los interiores pensados para disfrutar de las magníficas y excepcionales vistas del puerto y la ciudad, esa experiencia única que sólo desde The Krane se pueden tener. El negro en los interiores deja paso a esas vistas evitando toda distracción sobre el paisaje de los elementos decorativos. Lo importante aquí es esa experiencia, “el arte es la vista”, dicen y los ventanales abiertos convierten cada planta del Kranen en un gran espacio en los que juegan un papel importante la luz, los cielos y el mar en un inmenso cuadro vivo.

El puerto de Nordhavn ha sido fundamental durante siglos para una ciudad que nació sobre el mar. Pasados los años y finalizada o trasladada la actividad industrial, la recuperación de estos espacios supone un reto para la ciudad. Liberarlos y reedificar podría haber sido lo más sencillo, de hecho los terrenos recuperados se llenan de nuevas e innovadoras edificaciones, alguna del mismo estudio Arcgency, pero con esta intervención el puerto conservará su identidad mucho tiempo más, la de un puerto industrial hoy reconvertido.

Cualquier otro habría visto en la grúa de carbón un elemento industrial feo y poco aprovechable, pero la visión de este empresario y este arquitecto la ha convertido en algo realmente respetable. A la vista de las imágenes de The Krane, ¿quién no querría pasar una parte de su vida viviendo este espacio, esta experiencia? Bravo.