Siempre hemos sido más de verano que de invierno pero no dejamos nunca de reconocer el encanto y la magia de la montaña, especialmente nevada, ni tampoco la belleza de un diseño arquitectónico como la casa hoy os presentamos, Stealth House, la casa de Antony Gibbon en algún rincón perdido de Los Alpes.
La casa está diseñada para mirar a la cara al invierno y a la montaña, de ahí que sus ventanales sean de suelo a techo, claro que también está diseñada para el más absoluto confort de sus habitantes (algo que hoy en día, tras casi mes y medio confinados, sabemos que tiene una importancia superlativa).
La estructura de Stealth House es geométrica y toma forma en piedra y vidrio, su interior es cálido gracias a los acabados en madera, a la chimenea y a su cocina abierta, una calidez que contrasta con la vista que se disfruta desde sus ventanales... y desde el mirador de la parte superior de la vivienda, al que se accede a través de una bella escalera de forja y caracol.
Dadas las actuales circunstancias que vivimos, confinados, siempre que traemos una casa a nuestras páginas lo hacemos pensando 'yo aquí me confinaba' y en esta casa en la montaña -Stealth House-, tan moderna y espectacular con un entorno que anima tan poco a pasearlo, se nos antoja estupenda para un confinamiento ¿no crees?.
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