Richard Branson, dueño y señor de la compañía Virgin, se enamoró de las Islas Vírgenes británicas con tal intensidad que no pudo evitar lanzarse a su conquista; una conquista que no sólo no ha sido bélica sino de lujo y bienestar. Corrían los años 70 cuando Branson compró Necker Island y la convirtió en un exclusivo resort caribeño; conoció después una pequeña y coqueta isla que provocó en él ese efecto de atracción hipnótica que tienen las Islas Vírgenes británicas, Moskito Island, y se hizo también con esta isla en la que había únicamente un pequeño y discreto resort, nada que ver con el desarrollo actual.
En 2007 Branson puso al fin su sello y firma en Moskito Island y comenzó un desarrollo que ha convertido esta isla en paradigma de la belleza y el lujo; la exclusividad manda y con ella la privacidad, el servicio lo es de de alta calidad y dispone de una zona de recreo común.
En cuanto al alojamiento en sí, Moskito Island ofrece 11 habitaciones distribuídas en 3 villas y abre una posibilidad que, en función del momento, las circunstancias y el tipo de viaje, puede resultar de lo más tentador: alquilar el resort, las tres villas y disponer de las zonas de recreo.
Headland House, Beach Villa y Mangrove Villa son las tres espectaculares villas que Branson ha desarrollado en Isla Moskito y, junto a ellas, una zona de recreo de lo más completo: piscina infinita, bar, terraza, cancha de tenis, área de deportes náuticos, spa...
Moskito Island es, sin lugar a dudas, esa isla remota y cálida en la que siempre has soñado perderte, ahora puedes hacerlo pero, eso sí, la estancia supera los 2000 dólares por persona y noche.
Galería de imágenes
-
1
-
2
-
3
-
4
-
5
-
6
-
7
-
8
-
9
-
10
-
11
-
12
-
13
-
14
-
15
-
16
-
17
-
18
-
19
-
20
-
21
-
22
-
23