A 15 minutos de Marigot, capital de la parte francesa de la isla de San Martín, y muy cerca en coche de los magníficos restaurantes de Grand Case se encuentra un hotel muy especial: el Belmond La Samanna, un auténtico refugio paradisiaco en el que se hace realidad el sueño de perderse del mundo. Aquí todo es quietud, tranquilidad, diversión, buen tiempo y, sobre todo, ganas de vivir la vida al máximo.
Compuesto por diferentes habitaciones y suites, cuenta con 1 cabaña y 8 villas, todas con vistas al océano, que hacen las delicias de los huéspedes más exigente. Con camas king-size, hay suites con piscina privada, solarium en el techo y patios y balcones privados. Eso sí, las villas, ubicadas en la zona más exclusiva de St. Martin, cuentan con piscina de arquitectura infinita, además de terraza y conserje privado, servicio de habitaciones dos veces al día y un suculento desayuno buffet premium.
La Samanna posee, como buen resort, varios restaurantes. Destaca La Cave, un espacio pensado para cenas o almuerzos privados enmarcados en una evocadora bodega de vinos. Es posible configurar nuestro propio menú degustación con la ayuda del chef y, sobre todo, elegir entre las 12.000 botellas de vino de su bodega (incluyendo su propia etiqueta, Hospice de Beaune La Samanna). Por supuesto, no faltan cócteles junto al mar o a la piscina.
Hablando de mar... aquí presumen de poseer la playa de arena más blanca del mundo. Difícil no llevarles la razón cuando uno hunde sus pies y deja que los finos granos nos transporten al paraíso. La relajación es absoluta. Eso sí, el que quiera acción, que reserve hora en las actividades de buceo, submarinismo, esquí acuático, kayak y body board. ¡El mar a sus pies!
Galería de imágenes
-
1
-
2
-
3
-
4
-
5
-
6
-
7
-
8
-
9