En primavera la emocionalidad se desboca y te sientes; quizá sea porque despertamos a la luz y la calidez del sol o tal vez para romper el equilibro del equinoccio y su reparto de horas justo, a mitad, entre el día y la noche, a saber… pero lo cierto es que en primavera reímos y lloramos, estamos más despiertos y alterados, más receptivos, empáticos, intuitivos… nos sentimos más y no siempre mejor.
Llega pues el momento de afrontar el tiempo cálido y luminoso del año sintiéndonos, una nueva sensación olvidada un año atrás, que puede convertirse en el momento más placentero del año…
Imagina que logras olvidar las presiones, quehaceres, imprevistos y rutinas diarias… imagina que sólo estás tú, contigo, tu cuerpo y tu emoción, con la calidez del sol y la caricia del agua sobre tu piel… que profundizas en ti para sentarte frente a tu reflejo interior para escucharte y comprenderte, para ver con más claridad el camino que enfrentas cada día… para ejercitar el cuerpo al tiempo que relajas la mente… para sentirte, y sentirte bien.
¿Quién, todavía en su sano juicio, se negaría a una experiencia semejante?
Claro que una experiencia así no puede disfrutarse en cualquier lugar ni de cualquier modo, importa el dónde como importa el cuándo –primavera- y como en Godwana Experiences lo saben bien y, dado que la reflexión entre una multitud ansiosa de arena y mar se antoja complicada, nos proponen algunos de los lugares más espirituales y menos transitados del mundo para lanzarnos a nuestro viaje emocional: el corazón del mundo maya, la cuna de Orfeo o la falda india del Himalaya, Guatemala, Bulgaria, India, América, Europa o Asia envueltos en espiritualidad.
El misticismo del mundo maya y sus profecías es sorprendente y casi mágico, en el Hotel La Lancha, junto al Lago Peten Itza –y propiedad de Francis Ford Coppola- podrás acariciar esa magia y envolverte en ella al visitar Tikal, la ciudad más importante de la civilización maya.
No menos místico es el Himalaya indio que podrás vivir y sentir desde Ananda SPA, un balneario exclusivo, ubicado entre las ciudades mitológicas de Haridwar y Rishikesh, conceder a tu cuerpo el placer de sentirse para dejar a tu mente vagar libre en busca de ti mismo y tu destino.
Villa Gella, en las montañas Ródope, es el rincón del mundo en el que podrás instalarte para pasearte después por el pueblo de Gela… lugar en el que Orfeo fue tocado por Apolo en aras de la incuestionable espiritualidad de la música.
Tres lugares con historia y magia en entornos naturales únicos para ayudarte a dejar atrás todo y tanto como sea posible y necesario, y para que vuelvas a tu vida con energías renovadas… e ideas que lanzar, ahora sí, hacia delante.
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