La plaza Sintagma ha sido protagonista durante los últimos años de grandes revueltas y reivindicaciones del pueblo griego. Es también el lugar en el que se encuentra el protagonista de estas líneas. Un hotel de cinco estrellas que ha mantenido intacto su carácter de lujo único a pesar de la mala situación financiera del país heleno.
Con 102 habitaciones y suites, el King George ocupa un maravilloso palacio de fachada neoclásica que domina la plaza, y desde cuyas terrazas (especialmente las de su restaurante Tudor Hall, en la séptima planta) se puede ver el Parlamento, así como la Acrópolis al fondo, robusta sobre su mole de piedra. Creado en 1930 y reinaugurado recientemente, pertenece a la cadena Luxury Collection y en su decoración llaman la atención las muchas lámparas de araña que cuelgan del techo, así como las cortinas con sedas de Damasco.
Los detalles contemporáneos también abundan, desde los televisores Bang & Olufsen a las luces leds que iluminan sofisticadamente cada rincón. Pensado como el descanso más lujoso y placentero en la capital helena, es posible hospedarse aquí a partir de 230 euros y, de paso, disfrutar de un menú que une como en ningún otro sitio, las especialidades griegas con la cocina francesa.
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