Innovar en Bali en materia hotelera es posible, y no necesariamente con un exceso de florituras. Prueba de ello es el nuevo hotel Katamama, una de las últimas aperturas en la isla indonesia y que llama poderosamente la atención por su concepto, alejado del típico resort de playa y sin jugar tampoco la baza del cinco estrellas en medio de la naturaleza o los arrozales. Es, sencillamente, el lujo urbano más cosmopolita, eso sí, en pleno paraíso.
Junto a uno de los clubes de playa más famosos y excelentes de la isla, el Potato Head, en el increíble distrito de Seminyak, el Katamama es un hotel boutique de apenas 57 habitaciones (varias de ellas, suites) en el que detrás se encuentra precisamente el equipo que lleva el Potato Head desde hace años. A 45 minutos del aeropuerto en coche, es el epicentro perfecto para los que buscan disfrutar de la isla, la playa, los bares, las tiendas...
El concepto de hotel es más urbano que playero, de ahí que se haya puesto el acento en crear un ambiente contemporáneo más urbano y deslocalizado que el típico (tópico). Para empezar, en el edificio, de ladrillo rojo, pero también en su interior, con una recepción casi inexistente, donde se recibe a los huéspedes en el bar del lobby, tablet en mano para hacer la entrada con un primer brindis refrescante.
En cada habitación hay todo tipo de amenities y detalles de firmas de allí; y todo el mobiliario del hotel ha sido elaborado por artesanos locales, en una política de respeto por la economía de proximidad y el medio ambiente (por ejemplo, hay un ahorro en plásticos y se apuesta por el cristal para vasos y botellas en todo el recinto).
Los huéspedes del hotel pueden acceder cuando quieran al Potato Head, por lo que la fiesta está asegurada a cualquier hora; pero hay más actividades. El Katamama cuenta con una amplia carta de actividades deportivas y acuáticas, así como un perfecto gimnasio. Está planeado abrir un spa en el que recibir todo tipo de masajes y tratamientos (mientras, se ofrecen los servicios de centros de masaje de la zona).
Con todo tipo de detalles de gran lujo, habitaciones espaciosas en las que la decoración tiene toques de color y mucha luz, se trata del hotel de los que quieren sentirse como en casa, en un ambiente conocido. Desde 265 €/noche.
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