Con San Valentín a la vuelta de unos días, no podemos resistirnos a este hotel, uno nuevo, moderno, bello, acogedor, encantador y romántico en una ciudad que es la del amor por excelencia, París. ¿Quieres sorprender a tu parece con una escapada inesperada a la ciudad más romántica del mundo? entonces no lo dudes y haz tu reserva en Grands Boulevards, un hotel recién inaugurado en un rincón secreto de París desde el que no tardarás más de 20 minutos caminando en llegar a lugares tan emblemáticos como el Louvre o Place Vendôme e incluso algo menos en llegar a la zona de la Ópera de París.
Este nuevo hotel parisino ofrece un curioso equilibrio, el que ha alcanzado enlazando la tradición histórica del edificio que ocupa, construido antes de la Revolución Francesa, y un diseño moderno y funcional; cuenta con 50 habitaciones, un restaurante y una magnífica terraza en la azotea diseñada por Dorothée Meilinchzon, una de las interioristas más destacadas del momento especialmente en lo referente al interiorismo hotelero.
En todas las habitaciones de este hotel descubrimos como se han mantenido rasgos del hotel clásico como las camas con dosel, las paredes revestidas, los armarios de vidrio y mármol rojo, los muebles de madera envejecida o los apliques de bronce mezclados con otras características típicas de los hoteles más modernos como cafetera en todas las habitaciones, lujosas sábanas de algodón y satén o un espejo que parece precisamente eso, un espejo, pero que es en realidad una pantalla de televisión.
En la planta baja del hotel descubrirás un magnífico restaurante de comida franco-italiana, una cocina de mercado, producto y temporada que podrás degustar en la sala o en el jardín; la coctelería de este establecimiento merece también que te regales alguna de sus propuestas antes de retirarte a tu habitación.
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