Kioto fue el primer destino de Starwood en Japón y, este mismo año, Tokio se ha convertido en el segundo; en la Tokyo Garden Terrace, ocupando los pisos del 30 al 36, encontramos el Prince Gallery Tokio Kioicho un hotel de belleza y lujo cuyo interiorismo ha sido diseñado por David Rockwell.
La ubicación del hotel es inmejorable, en lo más alto de una torre que ofrece espectaculares vistas de la ciudad con el monte Fuji al fondo; son precisamente estas vistas las que sirven de inspiración para el diseño y decoración del hotel en todos sus espacios, aquí los objetos parecen levitar en armonía bajo el cielo de Tokio; la decoración se completa con obras de artistas vanguardistas japoneses que convierten este hotel en un lugar de excepcional belleza, un hotel en el que el vanguardismo es armonía y, en definitiva, belleza.
En la planta 36 descubrimos un espectacular atrio en el que el techo está a 9 metros del suelo mientras la planta 35 se reserva para dos restaurantes: el Oasis Garden -diseñado como un jardín en el cielo- y Washouku Souten -que evoca un mundo helado-. El hotel dispone de 240 habitaciones, todas con impresionantes vistas de la ciudad. Además de salas de reuniones -pensadas para los viajes de negocios o la organización de eventos y reuniones en las instalaciones del hotel- el grupo Rockwell recibió un encargo más en lo que respecta al interiorismo de este hotel: un SPA que sirviera de rincón de recogimiento y placer para los huéspedes del hotel, se trata de 5 salas de tratamiento, un gimnasio, una sala de yoga y una piscina.
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