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Dormir en el Castillo de Nieve de Kemi

El Castillo de Nieve de Kemi se presenta en todo su esplendor medieval, con torres de hasta 20 metros de altura.

Bienvenidos a la mayor fortaleza de nieve del mundo, quizás de las pocas que, salvo por la altura, no tiene mucho que envidiar al famoso Muro de la obra ‘Juego de Tronos’. Y es que esta construcción en el norte de Finlandia es poderosa y única a partes iguales. Eso sí, nace y muere cada año, pues, como otras muchas construcciones de nieve y hielo, se crea para su disfrute cada invierno y luego se deja derretir poco a poco al cerrar sus puertas.

En un área que cubre hasta un total de 20.000 metros cuadrados, el Castillo de Nieve de Kemi se presenta en todo su esplendor medieval, con torres de hasta 20 metros de altura en las esquinas, para vigilar y otear el horizonte, así como muros de hasta un kilómetro de largo. Dentro, un castillo de hasta tres plantas, con varias configuraciones y espacios entre los que destacan el hotel, la capilla y su magnífico restaurante.

Este último se llama, cómo no, SnowRestaurant, y sus mesas están construidas con hielo, al igual que sus asientos, pero estos se han recubierto con pieles de animales para que nos mojemos la ropa y tengamos un poco de calor. El menú del almuerzo tiene un precio de 25 €/persona y se compone de crema de queso, crema de vegetales, baguette, tarta de manzana con salsa de vainilla y pastel de hojaldre salado. Se puede reservar para cenar a las 19 h. y hay menús especiales para grupos a partir de 46 €, en los que destacan los ingredientes locales, desde el pescado del golfo de Botnia a las sopas y el cordero o el salmón.

La capilla, por su parte, es de la iglesia Ecuménica y tiene capacidad para hasta 100 personas, por lo que son muchas las familias (sobre todo asiáticas) que acuden hasta este rincón de Laponia para celebrar sus bodas.

Claro que la estrella del Castillo de Kemi es el hotel, con habitaciones dobles y una gran suite para celebrar lunas de miel. Todas se han decorado con objetos y motivos locales, es decir, los del pueblo sami. En concreto hay 12 habitaciones dobles, 4 superiores, dos para grupos con cinco camas y tres suites. Así, el máximo número de huéspedes que pueden pernoctar allí al día es de 48 personas.

El aire se mantiene a -5 ºC en todo momento, una temperatura que, aseguran en el hotel, garantiza el sueño. Dormir se realiza en sacos especiales que se han colocado sobre pieles y tatamis, por lo que dentro del mismo la temperatura será mucho mayor y podremos descansar con seguridad. Por supuesto, siendo un establecimiento finés, no falta la sauna, abierta, al igual que las duchas del complejo, tras el desayuno.

Desde 125 €/persona en habitación doble, toda una experiencia lapona que no se olvidará jamás.

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