El norte de Portugal no sólo son sus ciudades monumentales, como Oporto, Viana do Castelo, Braga o Guimarães –que también-, sino la vida rural que se despliega entre ellas. Lugares donde las tradiciones aparecen más nítidas, se disfruta de la naturaleza y se saborean los productos de la tierra recién cogidos. Si quieres disfrutar de este ambiente, te recomendamos Casa de Docim, una casa de campo envuelta en el mundo agrícola de Quinchães, una de las freguesías del concejo de Fafe (Braga).
Esta casa del siglo XVIII ha sido cuidadosamente restaurada en armonía con su pasado, pero integrando las comodidades propias de nuestro siglo. Se inserta en una espectacular finca con numerosos espacios para recrearse en este mundo agrícola y estar en contacto continuo con la naturaleza. Destacan el patio, el jardín urbano, el huerto o el jardín romántico. Espacios que invitan a pasear, contemplar las plantas e, incluso, participar en el día a día de la finca, como plantar o recoger fruta, verduras o hierbas.
Casa de Docim cuenta con 4 habitaciones dobles y 1 suite con dos dormitorios y sala de estar, que permite más comodidad si viajas en familia. La decoración es acogedora, inspirada en diferentes árboles de la finca. Los suelos son de madera, las paredes de granito pintadas y los techos son altos con grandes vigas también pintadas. Todas cuentan con baño privado y vistas al exterior, ya sea a través de ventanas, balcón o acceso directo al jardín o al patio. Si no te vale con reservar una de sus habitaciones, también existe la posibilidad de alquilar la casa en su conjunto.
El interior de la casa se completa con el comedor, la cocina, una gran sala de estar con chimenea y una sala donde se sirven los desayunos cada mañana, a base de productos locales y platos caseros recién hechos. También encontrarás rincones muy singulares, como la capilla. Pero sin duda, los exteriores, son el punto fuerte de esta casa de campo. Además de sus diferentes jardines, huertos, patio… también alberga piscinas para refrescarse en verano y zona para que jueguen los niños.
Casa de Docim realiza habitualmente actividades culturales, y es posible coincidir con exposiciones, presentaciones de libros, talleres sobre compostaje o pan casero. Y en cuanto a las excursiones y visitas, su ubicación permite realizar senderismo o rutas en bici por la naturaleza, así como visitar ciudades tan imponentes como Guimaraes, Braga, Oporto o Amarante.
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