La región alpina de Arlberg es una de las favoritas para quienes deciden practicar el deporte blanco en Austria. Allí se encuentra la estación de Lech-Zürs, un complejo de esquí entre el Tirol y Vorarlberg con picos como el de la Valluga, a 2.809 metros sobre el nivel del mar; y por donde se encuentran pueblos tan bucólicos como Stuben, St. Christoph o St. Anton. Está considerada una de las estaciones 'top' del lujo en los Alpes, y es que no faltan miembros de las Casas Reales, estrellas del deporte y el cine o grandes personalidades en sus pistas.
No es de extrañar, por tanto, que allí se pueda encontrar una opción tan mágica y discreta como el chalet Bentleys House, un hotel boutique de apenas 16 habitaciones que, con un estilo alpino clásico, nos da la bienvenida a Zürs. Se compone de tres chalets individuales, todos construidos en madera y piedra tradicional, con los tejados a dos aguas cargados de nieve en invierno. Lujo discreto que se traslada también a su interior, donde la madera sigue siendo la protagonista en todas las estancias, incluido un coqueto salón-bar con su propia barra.
A pesar de ser un complejo de edificios invernales, en el Bentleys House no falta luz en las estancias. Además, cuenta con zonas comunes que nos recuerdan que estamos en un cinco estrellas. Por ejemplo, su bodega, un espacio íntimo y especial donde poder organizar picoteos con amigos en los que, además de vino, es posible degustar todo tipo de quesos o incluso embutido italiano, que se corta en una máquina clásica de charcutería muy propia.
A esta bodega hay que sumar un bar, el comedor y una sala de descanso-biblioteca, además de la recepción y un spa con sauna y sala de masaje (en la última planta del complejo principal; ya que la piscina cubierta y el gimnasio están, como la bodega, en la planta sótano). El resto son estancias privadas para cada huésped. De hecho, cada chalet tiene un nombre: Jazzi, Zirma y Pazuel, con dos plantas que se reparten los diferentes dormitorios. Además, cada uno de ellos cuenta con su propio comedor y cocina, así como baños de mármol completamente equipados.
Cada dormitorio tiene su propia chimenea, lo que permite un ambiente cálido al acostarnos. Además, el mobiliario es funcional y moderno, con detalles de diseño entre otros más alpinos, jugando con colores contrastados y naturales. Con servicio de mayordomo las 24 horas, será difícil querer marcharse del Bentleys House (desde 750 €/noche) y sus vistas a 1.700 metros.
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