Solemos pensar en Andorra cuando el frío ya ha hecho presa de nuestro ánimo y la nieve, más que frío, nos sugiere diversión pero lo cierto es que el Principado tiene mucho que ofrecer fuera de su temporada alta, el otoño es, por ejemplo, la estación ideal para visitar Andorra y descubrir su gastronomía rica en setas, embutidos, quesos y carnes de caza y este año, además, podemos hacerlo alojándonos en un Andorra Park Hotel reformado y renovado.
La historia del Andorra Park Hotel es larga e intensa, se inauguró en los años 50 y, tras una reforma que ha durado dos años y terminó la pasada primavera, ha vuelto por sus fueros, es el hotel de lujo y cinco estrellas más espectacular del Principado, un hotel que nos ofrece mucho más que posada y fonda en los días de esquí: cuenta con zona wellness, sala de yoga, pistas de padel, un gimnasio completo y sala de fitness; cuenta con su propio bar y restaurante (Library Bar y La Pérgola) y está rodeado de 15.000 metros cuadrados de jardines.
¿Qué podemos esperar de Andorra en otoño además de una gastronomía rica a rabiar? el senderimo es la actividad estrella de la estación, apto además para todos los públicos porque hay rutas para todos los niveles, también podrás desubrir las pistas de esquí si prefieres que tu ruta sea en bicicleta eléctrica y por supuesto regalarte una tarde de compras por el centro de Andorra la Vella ¿un toque cultural? una visita al Museo Carmen Thyssen Andorra. Y lo mejor: todas estas actividades y experiencias se organizan desde el mismo hotel.
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