Zara continúa mostrándonos su colección veraniega. En esta ocasión el gigante de la moda nos lleva a pasear por el desierto a la puesta de sol. Cuatro modelos en ascendente trayectoria son las encargadas de esta presentación: Nora Attal, Mei Van Haaster, Sarea Eirud y Britt Ensink.
Ellas pasean entre las dunas, el viento remueve sus vestidos y alborota sus cabellos y el sol se posa sobre su piel. La ropa que llevan invoca esa primavera que se ha adelantado y ya está aquí y prendas más frescas que anhelan el verano.
Zara hace una apuesta por los materiales más veraniegos y por colores crudos, nude y granate que tan bien lucen con el sol. Las prendas están confeccionadas en lino, en suave algodón, en envolvente bambula. Los jerséis tienen cuerpo y volumen y combinan perfectamente con los pantalones flojos y las largas faldas bohemias.
Hay una apuesta por los vestidos camiseros, por los de tirantes y por los escotes pronunciados con mangas largas. Los volantes, los cinturones y los escotes bordados son otra de las propuestas. Los conjuntos de casaca y pantalón son el diseño estrella, ambas piezas se pueden llevar juntas o por separado, lo que le da mucha versatilidad a este modelo.
El gigante español de la moda low cost, ha lanzado una colección de edición limitada con la que piensa ampliar su campo de ventas. Prendas que no estarán masificadas, que tienen mucho más diseño y una inmejorable relación calidad precio.
Una nueva propuesta de Zara que espera llenar un hueco de moda con prendas más sofisticadas y menos vistas.
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