En una de sus habitaciones se encerró durante semanas la Garbo. Los chicos de Led Zeppelin se pasearon en moto por el vestíbulo. Jim Morrison gastó la que llamaba la octava de sus nueve vidas, tras intentar pasar a su habitación desde la azotea por un canalón. Vivien Leigh empapeló la habitación 5D con fotos de su marido Laurence Olivier al que añoraba. James Dean se coló por una ventana para poder participar en el casting de "Rebelde sin causa". F. Scott Fidgerald tuvo un ataque al corazón, John Belushi no lo contó y Elizabeth Taylor cuidó de Montgomery Cliff en el ático tras el accidente que casi le cuesta la vida.
Desde 1927 hasta la fecha, éstas y centenares de otras más anécdotas son parte del imaginario de historias, relatos, estrellas, personajes, actores, músicos y famosos sobre los que se alza en las colinas de West Hollywood, entre palmeras, el Chateau Marmont en Sunset Boulevard, a la que se suma servir como escenario y localización de la quinta campañana de la colección de Gerard Darel y su musa, la actriz californiana Robin Wright -a la que siempre recordaremos como la Princesa Prometida o el eterno amor de Forest Gump- en manos del famosísimo fotógrafo de moda Peter Lindbergh.
La perfecta combinación de la sensual, radiante y sencilla belleza de madurez de la Wright, una atmósfera retro y tenue, la fotografía de Lindbergh y la natural elegancia de las creaciones de Darel -como la de su simple bag- componen un cuadro armónico para esta campaña, en este lugar del que dicen es el "Hotel California" de los Eagles.
Galería de imágenes
-
1
-
2
-
3
-
4
-
5
-
6
-
7
-
8
-
9
