Los estadounidenses ricos, los que se agrupan bajo la etiqueta de “gente bien de toda la vida”, siempre han tenido una casa en los Hamptons. Es su recreo privado, su escapada de fin de semana, su lugar de veraneo por excelencia. Un sitio mítico por las celebrities que lo frecuentan, discreto, exclusivo y muy chic, el colmo de la sofisticación. Se sitúa al este de Long Island y está plagado de espectaculares mansiones que bordean el mar. Un emplazamiento privilegiado que garantiza a sus ocupantes intimidad y anonimato.
Veranear en los Hampton viene a ser como veranear al estilo Manhattan. Y el look que todo neoyorquino adinerado adopta para frecuentarlos es el que inspira la colección masculina de Carolina Herrera para la próxima primavera-verano.
¿Y en qué consiste este look? En pasarse horas eligiendo las prendas indicadas pero luciéndolas después como si fuera lo primero que se ha encontrado por la mañana al abrir el armario. Una elegancia no pretendida que sólo brindan tejidos nobles como linos y algodones. La sastrería, en lanas frías, ofrece siluetas impecables y detalles exquisitos. Los colores proporcionan sensaciones refrescantes. Se parte de azules, arenas y rojos, que se mezclan con azulones, verdes, corales o rosas. Todas las propuestas resultan muy sofisticadas, incluso las deportivas y las de punto. Remata la atmósfera estival las prendas con toques náuticos.
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