Bajo el lema “Italia es amor” los italianos Domenico Dolce y Stefano Gabbana vuelven a crear una colección en la que Italia es su gran inspiración. Algo que no es nuevo para los diseñadores pero en esta ocasión ha sido el auténtico leitmotiv de la colección. Incluso algunos de los vestidos se adornan con bordados con el nombre y los símbolos de las ciudades más emblemáticas de los destinos vacacionales de Italia.
Contraste entre tradición y modernidad, entre el negro absoluto y los colores vibrantes, corpiños y faldas ceñidas al cuerpo y vaporosos caftan y pijama estampados. Las mammas y nonnas italianas e incluso un par de monjas picaronas entre las turistas que envueltas en trajes coloridos hacen selfies a su paso con todo lo que representa la esencia italiana más tradicional.
El escenario cuenta una historia simple: puestos de fruta, de bolsos, comercios, espagueti, café, familia, sol y verano. Lugareños y visitantes juntos, compartiendo charla, fiesta, comida. Inmortalizando en selfies con sus teléfonos la esencia de las vacaciones en evocadores lugares de Italia. Teléfonos revestidos con carcasas tan coloridas y adornadas que son joyas también.
Vestidos negros ceñidos al cuerpo que sólo donnas italianas pueden llevar, pijamas coloridos sueltos y vaporosos, faldas de grandes vuelos, estampados y lunares, todo tan D&G. Solo estos diseñadores pueden hacer que en una escena de tradición tan italiana la seducción se respire en el ambiente. Love is in the air.
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