Moda Verano

Bond Bordelle

Cuando los mitos marcan tendencias, y la genialidad seductora de Bordelle hace el resto.

La mujer, la ropa de baño, la historia y una imagen: la de Ursula Andress en el papel de Honey Rider, emergiendo del mar, en "007 contra el Dr. No", la primera película de la saga del agente secreto con más estilo de todos los tiempos. Las mil palabras sobran, como es de suponer, porque ella, sin ser “el cuerpo”, que a Raquel Welch no se le puede quitar ese reconocimiento, supo lucir mejor que ninguna las dos piezas del bikini más mítico de todos los tiempos.

Y así en el transcurrir de los años desde 1962, ese estilo con cinturón de pieza metálica, a la cadera, dando curva a la cintura, y enmarcando bien el pecho, no ha dejado de marcar la actualidad de la moda de baño, que este año protagoniza Bordelle.

Tres colores. Arena, negro, blanco y rojo. Elastano. Y cinco modelos. Dos bañadores y tres bikinis. Todos como una segunda piel, marcando cada curva, potenciando cada contorno, para emular como nadie a la escultural chica Bond.

Y aunque a la firma británica se la conozca más por su bodywear, porque lo que Alexandra Popa y Javier Suárez hacen, no se puede denominar simplemente lencería. Hay que reconocer que sus diseños de baño, claramente inspirados en su línea de ropa interior, superan los estándares de seducción que se esperan para este tipo de piezas.

Una clara invitación a sumergirnos y a seducir, con subida de temperatura asegurada.