Hay firmas que trascienden a los lugares del mundo en los que nacen, que van más allá de sus tiempos y sus estaciones para convertirse en firmas universales que visten al mundo entero colección a colección. No se trata sólo de las tradicionales grandes marcas de la moda, la mayor parte de origen europeo y alguna americano, que también, sino que se trata de firmas que son capaces de combinar la creatividad, la elegancia y la funcionalidad de tal modo que el mundo entero quiere vestirlas.
Una firma así es Zimmermann, que ocupa espacios por doquier en su Australia natal, se hace ya presente a pie de calle en Estados Unidos y online allá donde llega la World Wide Web.
Y, curiosamente, la discordancia estacional con nuestras antípodas, que puede parecer a priori un inconveniente, es más bien una ventaja porque propicia situaciones como la que nos ocupa: Zimmerman presentando una colección ready-to-wear en pleno invierno australiano -estación que va de junio a agosto- y enamorando a media Europa con prendas que son perfectas para el otoño hacia el que nos dirigimos.
Se trata de una colección llena de prendas sugerentes en la que la calidez la pone el color; marinos, rojos y turquesas junto a un toque de floralidad en los prints, protagonizan vestidos de cierta elegancia y mucha sensualidad que van de los cortes más clásicos que ciñen cintura a los más vanguardistas en los que los volúmenes y la irregularidad mandan; los cuellos y escotes son también dignos de mención porque van igualmente de la clásico del tirante más sencillo a los cortes que dejan los hombros al aire a medio camino entre palabras de honor y cuello barco o tapando pecho para lucir espalda.
Cloud Stompers es una colección pensada para plantarle cara a las nubes, para pisar fuerte y lucir bella salga el sol por donde salga e incluso si ni tan siquiera se asoma; y está ya disponible en la tienda online de Zimmermann.
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