La nueva colección masculina de Adolfo Domínguez para este otoño-invierno, que está a la vuelta de la esquina, busca vestir a un hombre urbano y cosmopolita. Tal y como nos tiene acostumbrados el diseñador gallego, no cabe en su estilo lo superfluo, lo ornamental sin fundamento.
Sus prendas son elegantes, de líneas puras y rectas y confeccionadas con telas de gran calidad y calidez. Las prendas de abrigo son cálidas, son cómodas y funcionales. Creaciones para un hombre que gusta de lo natural, de lo verdadero, que sabe lo que es verdaderamente importante. Para un hombre activo, que trabaja, que viaja y que vive.
Prendas para la vida diaria, prendas para estar elegante en cualquier momento del día, prendas para tener una mañana de actividad y con las que podemos estar elegantes en una cena o comida de trabajo; pero con las que también podemos embarcarnos en la aventura de nuestra vida, que se puede presentar en el momento más inesperado.
El hombre Adolfo Domínguez se viste en colores neutros: grises, marengos, negros, arenas y sobre sus trajes informales luce abrigos de mezclilla y lana o abrigadas parcas para los rigores invernales. Y nunca se olvida de un buen bolso en el que cabe todo lo necesario para un fin de semana de aventura.
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