Eso nos preguntamos, en ocasiones, quienes vestimos niños a diario porque la elección tiene su complejidad; no queremos renunciar a la belleza, a cierto punto de elegancia ni mucho menos al buen gusto, como tampoco es renunciable la comodidad de las prendas y del loco bajito, como cantaría Serrat, que las habita. Así que ahí estamos cada mañana de cada día... y ahora, hijo mío, Kitipongo.
En la pregunta va implícita la respuesta porque, desde 2009, la respuesta al buen vestir infantil es Kitipongo, una firma española que diseña prendas infantiles contemporáneas y funcionales, sirva de muestra la colección de primavera y verano sobre la que ya hemos puesto las manos además de la intención.
Tejidos incluestionables, lino y algodón; colores vivos, alegres, luminosos y también suaves, los ineludibles del verano, como los estampados sutiles, a veces florales otras geométricos; y cortes cómodos, elegantes, casuales, siempre bellos. Y, sobre esa paleta de colores y esos tejidos, toman forma y cuerpo la primavera y el verano.
Las niñas, coquetas ellas, lucen vestidos con frunces y jaretas que les permiten moverse con total alegría y libertad mientras los niños visten modelos urbanos con mucho gris y mucho beige salpicado de alegres toques de color. Además, todas las prendas de la colección se han confeccionado en España, aquí, cerca, para no se pierda detalle alguno del taller de diseño al de confección.
Si tienes cerca peques de hasta 10 años, no te preguntes qué ponerles... llévatelos a Kitipongo.
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