Antes el verano tenía un olor. El de la arena pegada a las manos y el del mar en la punta de los labios, que no se marchaba ni tras la merienda. Antes el verano formaba parte de esas cosas bonitas que se les destina a los más pequeños del hogar, para su exclusivo uso y disfrute, como ocurre con la última colección de Nice Things.
Y es que hay cosas que, independientemente de la edad, solo pueden vivirse tras una sensibilidad especial. Algo que Nice Things lleva haciendo desde sus orígenes, en 1995, y que ahora continúa creando para unas mujeres amantes de la feminidad y la delicadeza. La colección para las pequeñas del hogar sigue estas mismas pautas pero trasladadas a una personalidad que, aunque en tamaño XS, no duda en transformarse hacia la severidad cuando de un elemento fundamental se trata: el de soñar.
Piezas con alma que envuelven de fantasía y comodidad unas prendas que formarán parte de los mejores sueños de las vacaciones del verano y que, sin duda algo, acabarán en el cofre junto con los tesoros de cosas bonitas para recordar.
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