La palabra que mejor define las propuestas de Tom Ford para la próxima temporada es, sin lugar a dudas, sofisticación.
Lo primero que nos soprende y atrae de las propuestas de Tom Ford para el próximo otoño, además de la bella campaña responsabilidad de Mario Sorenti, son los complementos, gafas grandes y de líneas marcadas y favorecedoras y soberbios pendientes protagonizan una colección de accesorios de los que hacen outfit.
Claro que en el caso de Tom Ford las prendas de vestir acompañan; en esta ocasión el modisto americano se deleita y regocija en la mezcla de estilos, la funcionalidad de los jeans se toca con la etiqueta del terciopelo dando como resultado propuestas que podríamos encuadrar dentro de lo que llamamos 'smart casual', dicho en modo coloquial e incluso jocoso, elegante pero informal o, al revés, informalmente elegante.
El negro, los jeans y la gama de los tostados se imponen como colores que son propios de la temporada otoñal, permitiéndose Tom Ford alguna alegría colorista en su colección de mujer; alegrías como el elegante y sugerente vestido blanco cortado en flecos.
Ondria Hardin, a quien ya hemos visto protagonizando campañas para firmas como Jimmy Choo, y Lucky Blue son los modelos elegidos para poner rostro y cuerpo a una colección en la que, si bien impera la sofisticación, se dan igualmente la mano la funcionalidad y la elegancia.
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