Hace tres años fuimos testigos del despegue de un nuevo fenómeno que pondría patas arriba a la industria, con la llegada de nuevos personajes que se convertirían en piezas clave de un tablero que, hasta entonces, cambiaba constantemente a través de las pasarelas impuestas por los diseñadores más conocidos del mundo. Hace unos tres años el streetstyle se hizo público y, con él, se destapó una de las fuentes de inspiración más importantes para algunas de las casas más conocidas que, hasta el momento, había pasado desapercibida… Un fenómeno que personas desconocidas, sobre todo mujeres, convirtieron en una alternativa a las revistas, modelos y celebrities que, más adelante, se unirían al movimiento de lo que conocemos como blogs y, por supuesto, sus creadores: los egobloggers.
El caso de Silvia Navarro es uno de los reconocidos en nuestro país. Esta sevillana ha hecho de ‘Una silla para mi bolso’ un referente en tendencias y estilo femenino seguido por muchísmas mujeres. Un triunfo que su creadora ha convertido en toda una carrera profesional que, en octubre de 2012, daría como fruto el nacimiento de una marca, que llevaría su propio nombre, en la que los grandes protagonistas son los vestidos. Cada una de sus piezas, marcadas por escotes traseros y cortes naïf, son el fiel reflejo de cada una de las seguidoras de Silvia, quien cree firmemente en las mujeres reales, hasta tal punto que las convirtió en las modelos de su primera colección, un éxito de ventas al agotarse a las pocas horas de su lanzamiento.
Para este otoño-invierno 2014/2015, su segundo trabajo muestra matices más madurados con patrones de cóctel y eventos especiales que cuentan con tejidos cuidados, rasos, crepes y brocados, que perfilan siluetas marcas con detalles de volúmenes adaptadas para cada personalidad. Comodidad y sofisticación unidos de la mano para hacer de Silvia Navarro todo un must en el maratón de eventos que están a punto de llegar…
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