Las chicas buenas van al cielo... las malas a todas partes, por eso Dolores Promesas, que nos sabe un tanto gamberras, además de su colección Heaven para vestir en perfecta elegancia, nos trae otras propuestas más alocadas y divertidas, llenas de color y atrevimiento... para el duro día a día de viajes, idas, vueltas y demás batallas.
Color por doquier, verdes, azules, naranjas o amarillos dan vida, calor y alegría a la estación fría y oscura; no faltan tampoco las blusas de uno y mil cortes ni las icónicas camisetas de la firma, ni por supuesto su emblema, la silueta y el rostro de Dolores en su corte garçon y su rabiosa sensualidad de labios rojos.
Pantalones pitillo o palazzo, jeans de colores, minivestidos y faldas igualmente mínimas; chalecos de cordero de mongolia, de pelo y color, cazadoras de cuero y abrigos de paño con maxivolantes...
Y es que el otoño e invierno de Dolores Promesas piensa en las mujeres de hoy, las de vidas intensas y pasiones desbocadas, las que lo quieren todo y, en un aire de fresca locura, se creen capaces de alcanzarlo.
Dolores es para jóvenes rockeras, grunge, urbanas, de sensual aire cómodo y masculino; también para mujeres de aire más naif, de dulce y divertido look y de fingida inocencia; y no olvida a la mujer elegante, sexy, interesante y atrevida...
Visto así se nos antoja casi imposible no encontrarte en Dolores Promesas...
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