Si eres de los que pensaba que el arte de la magia gótica y siniestra en la alta costura pertenecía al reino de McQueen quizás se te ha pasado por alto echarle un vistazo a una obra de arte que se ha gestado durante años en el Oriente Medio. El responsable de estas creaciones de tejidos, yuxtaposiciones, materiales –todo ellos unido bajo el manto del misterio y la fascinación- es Michael Cinco, un diseñador filipino asentado en Dubai, un experto amante de la complejidad, haciendo de ella un arma sumisa con el que ascender hasta el máximo grado de lujo y escenificación dentro del mundo de la high couture.
Como base, una pasión absoluta hacia las películas clásicas de Hollywood y sus glamurosas estrellas de cine, como Marlene Dietrich, Joan Crawford o Grace Kelly que se han convertido en toda una obsesión para Cinco, proyectando cada una de estas personalidades con el toque personal e indiscutible de sus visiones artísticas. Todo un trabajo que tuvo lugar desde la máxima timidez y falta de comprensión –algo que convertiría el drama en su máximo punto de apoyo a la hora de lanzar sus colecciones- por parte del genio que en 1997 decidió mudarse al otro lado del mundo para triunfar en la ‘inyección’ de nuevos matices y técnicas en el sector.
Historias que se representan de nuevo en su colección para este otoño-invierno 2014, donde existe un equilibrio perfecto entre la creatividad y la tragedia, fundamental para convertirlo en un producto de alta costura y un sueño para las mujeres del mundo que pueden permitirse una de sus creaciones. La simbiosis para hacer de Michael un artista referente dentro del dramatismo y la elegancia que, por supuesto, forman parte de la moda. Así es el invierno de la alta costura, por Michael Cinco, fascinante glamour.
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