En pleno mes de noviembre comenzamos el baile de fiestas y compromisos porque, si bien es cierto que para la Navidad nos queda todavía un trecho, aquí están ya, a la vuelta de pocos días, las cenas de amigos, las de empresa, las de los amigos de tus amigos y hasta las de tu pareja. E, inevitablemente, hay que ponerse guapa.
Topshop tiene mucho que ofrecer para esos momentos de gala, etiqueta y fiesta y, para mostrárnoslo, ha contado una vez con Cara Delevingne a la que ya hemos visto con anterioridad luciento Topshop en campaña como, antes que ella, lo hiciera Kate Moss.
Para las próximas ocasiones de fiesta y celebración Topshop acorta las faldas y eleva el tacón, destaca con brillos y lleva el punto elegante al negro y también al blanco sin acabar de renunciar del todo a otros tonos como bien pudiera ser el verde.
Topshop es moda, moda de estar a la última todos y cada uno de los días del año, y moda, también, asequible; pero, volviendo al principio, Tophshop es, por encima de todo moda e imagen, de ahí que sus campañas no pasen nunca desapercibidas, ellos cuidan especialmente que no sea así y por esos el rostro de sus embajadoras es siempre una imagen representativa de su tiempo. Lo fue Kate Moss en su día y también poco tiempo atrás en lo que fue un bridis por los viejos tiempos de la incombustible Moss; y lo es ahora Cara Delevingne.
Es la top del momento, una de las más deseadas y admiradas, una belleza serena a veces y absolutamente rompedora cuando la campaña lo requiere, es, dicen, un tanto revoltosa sin llegar a la rebeldía excesiva... y algo de eso debe haber cuando sus padres, protegiendo el bienestar de la familia, le sugirieron que se independizase... ahí es nada...
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