Robert Pattinson protagoniza no sólo Crepúsculo sin también la última campaña de Dior; claro que el protagonismo es, en esta ocasión, compartido porque tras la cámara que lo enfoca se esconde el mismísimo Karl Lagerfeld.
La combinación de talentos es, pues, mayúscula: Kris Van Assche, actual director creativo de Dior, pone la magia, la vanguardia y la belleza propia de Christian Dior, Lagerfeld suma su talento creativo a la hora y momento de disparar su cámara en el instante perfecto de luz y encanto para inmortalizar al último en discordia, el modelo y actor protagonista de Crepúsculo, Robert Pattinson.
El resultado de esta suma de talentos es un campaña de una belleza impactante, las imágenes son muy Lagerfeld, que elige una vez más el blanco y negro añadiendo así dramatismo a todo el conjunto; en esas imágenes de puro arte, Robert Pattinson posa con la elegancia propia de quien la tiene de serie, mostrándonos desde su postura serena las propuestas que ha ideado Kriss Van Assche para Dior, esas que son, en realidad, el objeto de la campaña.
La elegancia de los trajes sastre completos con su corbata, a cuerpo gentil o bajo una parka, camisas de grandes cuatros, pantalones de etiqueta y todos sus complementos; como suele ocurrir siempre con Dior, se entremezclan ante nuestos ojos, cuando no en nuestras manos, la clasicidad propia del paso de los años y la tendencia a la serenidad y el sosiego en el vestir con la locura de las vanguardias y su creatividad a veces loca y antagónica de la armonía; claro que Dior, con Kris Van Assche al frente, logra lidiar esos momentos de caos y riesgo con mano firme y serena, con la certeza de que estamos en ese punto de equilibrio perfecto que viene marcado por lo que fuimos y lo que seremos, en el presente.
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