La elegancia es el sello de Caramelo, y de la mano de la elegancia, un punto de clasicismo y contemporaneidad; sus propuestas no resultan rompedoras ni sorpredentes... pero siempre encantan y enganchan, más si cabe en esta ocasión en la que su inspiración se viste en british.
De norte a norte Caramelo busca la inspiración en un estilo que es suyo en grado superlativo, el british, pero no se deja arrebatar su habitual discreción por los a veces atrevidos y discordantes prints británicos sino que se suma a los cortes, tejidos, paños y estilos más elegantes del gusto inglés.
Las propuestas más casual de la firma coquetean con los ocres, cremas y burdeos, colores muy de otoño tanto en polos y camisas como en jerseys, prendas de abrigo e incluso chalecos, y siempre presentes también el gris y el negro que son casi de uso obligado en la elegancia de cualquier temporada.
Y qué decir de los trajes de una firma de reputada sastrería como Caramelo, encontramos en estas propuestas un punto de atrevimiento en algunas de las corbatas mientras el sastre, en su pantalón y su chaqueta, se mantiene en negro, gris y azul navy o tostados.
Si eres de buen gusto clásico, de vestir cómodo pero con estilo y te pierde la discreción elegante, la colección de Caramelo está pensada para ti, tanto en sus propuestas más casual, que no lo son nunca del todo, como en las más formales que destilan elegancia en cada corte.
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