¿Por qué parece tan feliz Laura Sánchez en estas fotos? Pues porque luce las prendas de Indi&Cold, una firma creada con el propósito de ofrecer un producto alegre y optimista que contagie una actitud positiva. Desde luego, sus preciosas faldas y vestidos, que parecen una versión moderna de los que salían en La casa de la pradera, te harán sonreír de puro placer. Y sus precios asequibles, también.
¿Y qué es Indi&Cold? Son prendas muy femeninas de ejecución impecable y estilo romántico. Ropa de calidad, plagada de ricos detalles que le dan personalidad propia y la hacen inconfundible. Diseños que no desdeñan ninguna influencia y que recorren el tramo que separa lo retro de lo étnico. Texturas, colores y estampados variopintos que embelesan. Y unas hechuras versátiles, tan confortables como favorecedoras. Todo esto y más es Indi&Cold, resultado de la fusión de otras dos que te sonarán: Individual y Cold Alaska.
Cristina Villar asume la dirección creativa de esta etiqueta. Su primera colección, disponible en tiendas multimarca y en establecimientos propios, propone vestidos de cinturas ceñidas y largos hasta la rodilla; blusas con lazada al cuello; chaquetas tricot de mangas estrechas; faldas entalladas… Los colores repasan la paleta otoñal: terracota, cemento, plomo, jade, verde hierba, piscina y el rojo, en versión sandía o ladrillo. Los estampados de flores de invierno se combinan con cuadros, topos y algún print animal. Todo reunido en cinco líneas que toman como musa la ciudad de Nueva York, sus barrios tan dispares y sus culturas variopintas: Tribeca (modelos sofisticados para la noche), Midtown (chic urbano), Brooklyn (toques étnicos), Soho (piezas artesanales) y Lower East Side (flores y tricot para una estética retro).
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