Karl Lagerfeld continua la senda de las campañas imposibles para presentar sus propuestas para Chanel. Le hemos visto llevar la elegancia de la icónica firma francesa al supermercado y también al lejano oeste, ahora toca un backgroud deportivo con tintes de fuerza y notas de cierta agresividad.
Cara Delevingne y Binx Walton visten los cortes clásicos de Chanel en sus coquetos trajes de chaqueta subidas a un ring, corriendo bolso en mano como alma que lleva el diablo y calzando zapatillas, haciendo brazo con las pesas o incluso flexiones y también calentando músculos o descansando de modo descarado con un bolso al hombro a modo de radiocassette de los de antes.
El contraste entre el fondo y la forma, el entorno, los modos y las prendas y accesorios es absoluto como ocurría cuando era el supermercado el que daba marco al desfile. Y es que Lagerfeld utiliza las campañas para lo que son, para llamar la atención, sorprender, innovar y lo hace siendo fiel a la elegancia que es santo y seña de Chanel como lo era de su fundadora.
En cuanto a las propuestas, el kaiser incluye siempre alguna sorpresa, algún detalle vanguardista y muy actual como botas de caña alta de inspiración deportiva o incluso algún bolso de lo más llamativo pero, en esencia, es fiel a la clasicidad de Chanel, a ese punto de elegancia y buen vestir que pisa fuerte y siempre perfumado.
Coco Coach es el título de la campaña y no puede ser más acertado; las prendas de esta colección, que estará disponible en tiendas a partir de septiembre, serían sin duda del gusto de la soberbia diseñadora francesa y la campaña, si bien cabe que le arrancara alguna mueca, también.
Y es que por más que el ambiente y la actitud sean de boxeo, pesas, atletismo y calentamiento a fondo, las formas son de una plasticidad absoluta y la belleza de las imágenes, incuestionable.
Galería de imágenes
-
1
-
2
-
3
-
4
-
5
-
6
-
7
-
8
-
9
-
10
-
11
-
12