Adolfo Domínguez siempre ha diseñado en el ámbito de lo sencillo huyendo de la sofisticación más recargada, su estilo y su clase han encontrado buen acomodo en líneas depuradas y en tejidos de alta calidad; y es precisamente en esa esencia tan propia de esta firma de moda donde reside la inspiración de su próxima temporada.
Los fríos que están por venir vestirán una paleta de color propia del otoño y el invierno y unas prendas pensadas y diseñadas para favorecer y resultar a un tiempo cómodas y bellas, encantadoras siempre y luciendo esa sutil elegancia que sólo puede dibujarse en líneas sencillas cortadas sobre tejidos que destacan por su calidad.
Misha Hart y Elliot Vulliod, ella escocesa, él francés y ambos figuras que despuntan en el panorama de la moda actual, ponen rostro a una colección que define más si cabe el estilo de Adolfo Domínguez y su constante coqueteo con la sencillez más bella y elegante. La campaña en sí, en línea con la colección, tiende al minimalismo, a los fondos neutros y los colores de temporada, la firma el fotógrafo Scott Trindle.
Además de rendir la elegancia a la sencillez, Adolfo Domínguez viste en ella al lujo entendido como el equilibrio perfecto entre la elegancia y la funcionalidad, la belleza, la comodidad y el estilo; el lujo es tiempo y es silencio, es la antítesis de la vida acelerada y caótica que viviremos el próximo otoño e invierno y que tendrá en las propuestas de la firma gallega un elegante oasis de paz.
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