Eso es precisamente lo que siente la modelo y activista Christy Turlington Burns por Calvin Klein. Las colaboraciones, que comenzaron a finales de los 80 en las primeras pasarelas de la firma, han dado como fruto una relación especial, con una complicidad y una comodidad que se vuelve a demostrar en la última campaña de su colección Underwear para el próximo otoño.
Una selección de los grandes imprescindibles de la marca que para la próxima temporada facilita una de las tareas más difíciles para las mujeres: encontrar el sujetador perfecto. Tallas y siluetas femeninas que se catalogan en los grandes clásicos, como son el sensual push-up, un romántico balconette y el minimalista sostén en forma de triángulo.
Modelos confeccionados con los mejores materiales, adaptables y sencillos que cumplen con su función principal: otorgar descanso, provocar deseo y proporcionar esa sensación de bienestar y mimo con una misma… Ese que Burns destila por cada poro de su piel en esta nueva propuesta que, sin duda alguna, es un homenaje al cariño íntimo provocado por años de experiencia y profesionalidad.