Bordelle estrena otoño y lo hace manteniendo su estilo sugerente y provocador; y es que el tono de sus propuestas no ha cambiado desde su primera colección, en 2009, hasta la fecha, forma parte de su esencia, de su conceptualización como firma de moda que surgió de una única cabeza, la de Alexandra Popa, fundadora y directora creativa de Bordelle.
La lencería italiana y francesa no necesita presentación como tampoco la inglesa, que tiene además sus propios referentes; el hecho de que uno de ellos sea una firma que no cuenta con más que un lustro de historia, demuestra el éxito tanto de su estilo en general como de sus diseños en particular.
Bordelle es lencería inglesa y de lujo, es atrevimiento y descaro, un juego de erotismo y belleza que coquetea con el deseo que despierta aquello que sus prendas ocultan; se trata de un juego complejo que mantiene el interés tanto como mantenga el estilo y la clase y es también un juego que Bordelle domina.
Sus propuestas para vestir la intimidad más atrevida del próximo otoño mantienen los detalles que son signo y símbolo de la casa como los cruces constantes de tiras de tejido sobre la piel; el negro es, sin duda y como no puede ser de otro modo en tamaño estilo, el color dominante, un tono que se deja querer por un sugerente verde oliva y un arrebatador fucsia en algunas de las propuestas de Bordelle.
A la colección no le falta detalle, desde los ligueros con medias que terminan antes de que lo hagan las piernas, que son además un símbolo clásico de seducción, hasta un mundo de encajes en los detalles; y en los detalles también los aros que, una colección lencera con tan elevado todo de erotismo, son una provocación mayúscula.
Bordelle es una de las firmas esenciales de la lencería inglesa que, tras cinco años en el mercado, se ha hecho con su propio lugar en el mundo lencero... ¿te atreves a probarla?
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