Lencería

La lencería bohemia de Felice Art Couture

Decadencia bohemia es el título que Felice Art Couture da a su colección de invierno, lounge y lencería.

Dejamos para otra noche y otras citas la lencería francesa e italiana que tanto nos gustan, también la británica o la rumana que tienden a sorprendernos y seducirnos, e incluso la española que tenemos siempre tan a mano; y lo hacemos para descubrir que también en Alemania saben vestir el interior femenino con alta costura lencera de gusto exquisito.

Felice Art Couture es una firma germana que entiende que el interior femenino es bohemio y suntuoso, romántico, provocador, sensual y lujoso; y por todo eso, por su particular modo de entendernos, nos proponen una colección un tanto vintage en rosa empolvado, negro intenso, brillos de cristal, transparencias caprichosas, lazos, sedas, tul... toda una delicia lencera.

Todas y cada una de las piezas de Felice Art Couture están diseñadas al detalle en su atelier y fabricadas a mano del modo más artesanal, se trata de muestras únicas de belleza íntima que transformarán para siempre tu fondo de armario lencero. Los complementos y adornos merecen mención especial, destacan los cuellos, algunos de imponente presencia, y también los detalles de los corsés y de algunos vestidos de lounge.

La lencería ha mostrado siempre su doble vertiente de lujuria y seducción frente a higiene y calidez, dos ideas que en ocasiones tienden a ser contrapuestas y enfrentar belleza y funcionalidad; claro que si nos adentramos en la historia de la lencería, descubrimos que el SXVIII y el XIX han sido muy suntuosos y provocadores en el sentido más lencero de la expresión; es precisamente ahí, y quizá también en los felices años 20 de ese mismo siglo, donde Felice Art Couture encuentra inspiración para diseñar interiores sorprendentes y seductores que tienden siempre a resaltar y embellecer la silueta femenina.

Y ahora que sabemos que también en Alemania saben cuidar de nuestra belleza más íntima, ampliamos nuestro fondo de armario lencero y seguimos sorprendiendo... y seduciendo.

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