La fierecilla domada (según Andrés Sardá).

Las campañas de moda están hechas para emocionarnos porque es así como atraen nuestra atención y nos encaminan a su fin principal: enamorarnos de aquello que nos muestran; hay campañas que logran su fin recurriendo a un cómplice que no falla nunca, la belleza, pero cuando además se visten de cierta evocación el éxito es casi seguro; ésto es lo que nos ha ocurrido con la campaña de otoño e invierno de Andrés Sardá, nos ha conquistado por la belleza plástica de sus imágenes y también porque al recurrir al mundo ecuestre para ambientarse, nos ha hecho pensar en la doma y ¿cómo pensar en la doma y no hacerlo en la fierecilla domada de Shakespeare?

La fierecilla domada, la doma de la bravía, la doma de la furia... o en su título original, The Taming of the Shrew; Elisabeth Taylor en el papel de Catalina, la mujer indomable, con Richard Burton como compañero de reparto bajo la dirección de Franco Zefirelli, representó como nadie al indómito personaje de esta comedia de enredos tan propia de Shakespeare, tanto que es la quinta más traducida al castellano de todas sus obras sólo detrás de las míticas Romeo y Julieta, Hamlet, Macbeth y El Rey Lear y por delante de otras no menos memorables como Mucho ruído y pocas nueces, Otelo o El sueño de una noche de verano. ¿Imaginas a la Taylor, en sus años de fierecilla domada, vestida por Andrés Sardá? Nosotros también, eso sí, de una cosa estamos seguros: con Andrés Sardá como cómplice, ni Richard Burton hubiera podido con ella.

Desde 1962 lleva Andrés Sardá vistiendo nuestro interior, primero bajo la dirección creativa de su fundador y ahora bajo el mandato no menos creativo de su hija, Nuria Sardá y año tras año, temporada, se confirman como nuestros favoritos para hablar y vestir lencería: en su colección de otoño manda el negro pero no es el único tono que se hace presente, los encajes son de notable belleza y la elegancia y sofisticación de cada pieza las convierte en modelos únicos.

Galería de imágenes