Lencería

Escora, arquitectura íntima

Interiores seductores y sugerentes que fueron un día arquitectónicos.

150 años dan para dos vidas y para conocer en ellas el mundo como fue y como es, para contar una historia larga y sorprendente que empieza y termina en el interior; y es que hablamos de lencería, la de la centenaria firma alemana Escora.

Fuen en 1862 cuando la firma lencera alemana abre su fábrica y comienza a diseñar y tejer prendas íntimas que enamoraban al más excéptico; pero además, aquellas prendas de corte arquitectónico -los corsés eran entonces de uso casi obligado- sufrieron los ajustes necesarios para mantener la cintura ceñida sin dificultar la respiración quien los lucía.

Aquella pequeña innovación en el diseño de los corsés marcó tendencia en Escora hasta el punto de convertir la innovación en parte esencial de su razón de ser.

Hoy en día no queda apenas nada de aquellos corsés de corte decimonónico, queda, eso sí, toda la magia, el glamour y la belleza. No hay más que dejarse seducir por las propuestas de verano e invierno del año que toca a su fín.

El verano fue oro y negro y fue la esencia más sofisticada del tiempo de luz y calor; ahora en cambio, llegado el invierno, todo tiende al mate y el contraste blanco/negro gana también en intesidad frente al clásico blanco y negro que no, en realidad, más que gris.

Sofisticación, belleza, elegancia, juego... De escora.