Fue aquí donde el Sr Rochester comenzó a tomar cuerpo y su esposa... a convertirse en un fantasma que no era tal ¿el motivo? cabe que fuera la propia casa, sus notables jardines, su gran escalera... o la historia de su fantasma o tal vez fuera todo ello en su conjunto pero lo cierto es que es gracias a esta casa que podemos disfrutar de una de las novelas más intensas de la literatura inglesa e incluso universal.
Actualmente Norton Conyers House and Garden no sólo puede visitarse sino que incluso es posible organizar eventos en su interior o en sus jardines gracias a la restauración de la que fue objeto hace poco más de dos años. Diez fueron los años que esta mansión medieval estuvo cerrada al público mientras se recuperaba de los daños sufridos en sus siglos de historia y vida; ahora, ya recuperada, se puede visitar y hacerlo con los ojos de Charlotte Brontë en el alma de Jane Eyre.
Dicen que Charlotte salió de esta antigua casa con dos ideas en su cabeza, una estética y otra de fondo y contenido, ambas podrás vivirlas en primera persona si visitas Norton Conyers House and Garden: todo comenzó en la soberbia escalera interior de la casa, allí imaginó Charlotte a un héroe de cierta edad aunque todavía con fuerte y apasionado, lo imaginó también complejo, debía ser un galán a la altura de la mujer que era ya Jane Eyre en su cabeza, con algún secreto oscuro tal vez, uno que no llegaba a imaginar... hasta que, recorriendo y conociendo esta casa, alguien le contó la historia de su fantasma... El fantasma era una mujer que había perdido la razón y vivía confinada en el ático de esta gran mansión.
Charlotte unió a aquella mujer loca a su Jane Eyre como había unido la escalera a Thornfield Hall y así tuvo ya todas las piezas para hilar una historia protagonizada por una mujer rendida a sus convicciones por encima de cualquier otra convención social y un hombre atrapado por su realidad, una realidad que chocaba frontalmente con las convicciones de Jane... Y no diremos más, más dice, eso sí, la novela.
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Fechas de apertura 2016:
1-4 & 27-30 de mayo, 14-18 & 27-31 de julio, 18-21 & 26-29 de agosto, desde las 2 de la tarde hasta las 5 - Ten en cuenta que al ático no se puede acceder con tacones, sólo con calzado plano.
Los jardines por su parte pueden ser visitados en las mismas fechas que la casa y, además, los domingos desde el 5 de junio hasta el 31 de julio; lunes y jueves a lo largo del año, siempre a partir de las 2 y hasta las 5 salvo en invierno, cuando la hora de cierre serán las 4.
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