Ribera llegó a Roma con unos quince años para formarse como pintor. Caravaggio, Rafael, Guido Reni inspiran una obra que alcanza plena madurez en Nápoles hacia 1620. Pero, al igual que otros artistas de su época, José de Ribera también se inspiró en las esculturas clásicas. Lo que probablemente ignoraba el maestro español es la curiosidad morbosa por la violencia física que iba a ir desarrollando a lo largo de su carrera. La figura humana, la fealdad y la violencia, la tortura y el castigo son los temas recurrentes en la obra gráfica de un pintor que cultivó el dibujo como pocos en su época.
El Museo del Prado presenta hoy un nuevo cómic que, coincidiendo con la exposición Ribera. Maestro del dibujo, plantea un acercamiento a la obra del artista valenciano a través las pinturas que representan con mayor vehemencia su estética del dolor: las Furias. Partiendo de las imágenes de Ticio e Ixión de Ribera, Antonio Altarriba y Keko proponen una intriga apasionante que transcurre entre la luz y la oscuridad, la redención y el dolor, la gracia y la penitencia, y el perdón y la furia. No se trata de una trama biográfica ni una aproximación a su pintura, sino una historia relacionada con su obra. Una historia violenta y oscura, impregnada de misterios y visiones crueles que Altarriba y Keko trasladan a viñetas con un profesor obsesionado como personaje principal.
El perdón y la furia.
En 1632 José de Ribera, el Españoleto, recibe el encargo de pintar las Furias, un conjunto de cuatro cuadros sobre los grandes suplicios de la mitología clásica. Se conservan, sufriendo terrible castigo, las de Ticio e Ixión. No las correspondientes a Sísifo y Tántalo, desaparecidas sin dejar rastro. Nadie sabe cuándo, cómo ni por qué. Este es el punto de partida de las ilustraciones de Altarriba y Keko.
Osvaldo González Sanmartín, profesor en la Universidad de Salamanca y protagonista del cómic El perdón y la furia, se empeña en descubrir el misterio. Incluso, en reparar la pérdida. Nada, ni siquiera el asesinato y la locura, se interpondrán en el obstinado peregrinaje de Osvaldo por los secretos de la obra de Ribera. El cómic, ambientado en la época actual, tiene mucho de novela policial, de crímenes y obsesiones personales, y una estética similar a su galardonada novela gráfica Yo, asesino.
Ribera. Maestro del dibujo.
La exposición, que podrá verse hasta el 19 de febrero, abarca una exhaustiva visión de dibujos, pinturas y aguafuertes del Españoleto realizados con pluma, tinta y lápiz. Incluye también una pequeña escultura en cera de Giovan Bernardino Azzolino (suegro del pintor) relacionada con las estampas anatómicas de Ribera. Así como varias de sus obras maestras: el Sansón y Dalila del Museo de Córdoba, Aquiles entre las hijas de Licomedes del Teylers Museum en Haarlem o el San Alberto del British Museum.
Galería de imágenes
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De izquierda a derecha: Antonio Altarriba y Keko (José Antonio Godoy), guionista e ilustrador, respectivamente, del cómic El perdón y la furia. Fotografía © Museo Nacional del Prado.
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Página 11 cómic El perdón y la furia. Antonio Altarriba y Keko Museo del Prado.
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Página 10 cómic El perdón y la furia. Antonio Altarriba y Keko Museo del Prado.
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Página 9 comic El perdón y la furia. Antonio Altarriba y Keko Museo del Prado.
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Portada cómic El perdón y la furia. Antonio Altarriba y Keko Museo del Prado.
