Kate Macer (Emily Blunt) aún mantiene el idealismo que la hizo entrar en el FBI. Su trabajo atrae la atención de Matt Graver (Josh Brolin), un agente especial que la introduce en una fuerza especial de élite para luchar contra el narcotráfico en la frontera con Méjico. El grupo debe trabajar bajo las indicaciones de Alejandro (Benicio del Toro), un personaje enigmático y oscuro, cuyas motivaciones y maneras de moverse en el mundo de la droga terminan por poner a Kate al límite de sus ideales y fuerzas, y a cuestionarse todo en lo que creía, si es que quiere salir con vida.
Sicario es uno de esos thrillers que no olvidas. Que vuelves a ver no porque ya no te acuerdes de él, si no precisamente porque lo recuerdas. Villeneuve tiene la virtud de hacernos pasar un cuento que ya nos sabemos por nuevo, de la misma manera que lo hizo en la extraordinaria Prisioneros, esta vez con el mundo fronterizo de la droga. Porque la historia nos suena: joven idealista se encuentra con la realidad de la vida cuando tiene que luchar contra el crimen. Pero nos da lo mismo. Porque Emily Blunt y Josh Brolin actúan con la tensión necesaria. Y porque está Benicio del Toro, que empieza a ser un valor seguro para que una película suba bastantes puntos tan sólo con su presencia.
Sicario también es un valor seguro. Apuesta por ella.
Título original: Sicario
Año: 2015
Duración: 121 min.
País: Estados Unidos
Director: Denis Villeneuve
Guión: Taylor Sheridan
Música: Jóhann Jóhannsson
Fotografía: Roger Deakins
Reparto: Emily Blunt, Benicio Del Toro, Josh Brolin, Victor Garber, Jon Bernthal, Daniel Kaluuya, Maximiliano Hernández, Dylan Kenin, Frank Powers, Bernardo P. Saracino, Edgar Arreola, Marty Lindsey, Julio Cedillo
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