Alicia Martín
Arte

"retratodeartista": los libros y Alicia Martín

El próximo 9 de junio, en el marco del festival de fotografía PHotoEspaña 2018, la Galería Lucía Mendoza inaugura la exposición "retratodeartista", dedicada a Alicia Martín.

2018 está siendo para Alicia Martín una de las etapas más dulces de su carrera artística en España. Dos señaladas exposiciones han marcado su trayectoria estos últimos meses. La primera en el Domus Artium de Salamanca, repleta de reminiscencias autobiográficas, llevaba por título Palíndromo. No había aún cerrado sus puertas cuando se abrieron las de la última edición de Reinterpretada, en el Lázaro Galdiano de Madrid.

El próximo 9 de junio, en el marco del festival de fotografía PHotoEspaña 2018, la Galería Lucía Mendoza inaugura retratodeartista. Una muestra comisariada por el crítico de arte Francisco Carpio, que plantea una vez más un acercamiento al universo literario de la artista madrileña a través de la fotografía, el vídeo y la instalación. La personal mirada de Alicia Martín propone una de las más sugerentes relaciones entre la literatura y las artes plásticas. El título de la muestra se inspira en una serie de dibujos homónima creada a partir de revistas de arte contemporáneo cuyas páginas se aglomeran formando bolas compactas, un retrato de retratos, de semblanzas superpuestas, diluidas a golpe de martillo como símbolo de la identidad colectiva.

Alicia Martín (Madrid, 1964) es una de las artistas contemporáneas españolas más internacionales. Ventanas que vomitan libros, paredes que estallan bajo su presión, donuts gigantescos de páginas desordenadas… La conexión que establece entre materia y volumen, estructura y movimiento, espacio, tiempo y concepto logra un efecto mucho más espiritual que material. Licenciada en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid, ha participado en numerosas exposiciones individuales desde 2001 y realizado intervenciones específicas en Francia, Italia, Países Bajos, Austria, México, Colombia, Rusia y España.

El libro es la estrella de su obra, protagonista de sus fotografías, dibujos, esculturas, instalaciones y vídeos. Aunque sus primeros trabajos con libros se sitúan a principios de los 90, es casi imposible determinar cuándo comenzó su idilio con ellos. Ni siquiera si se trata de un amor incondicional o una prolongación de sí misma. Probablemente van por ahí los tiros.

Los libros y Alicia Martín se necesitan, se equilibran, establecen un diálogo infinito basado en la atemporalidad y una profunda carga simbólica. Me interesan por su carácter universal, cualquier persona sin diferencia de edad, cultura, idioma ve un libro y sabe lo que es. Y por su esencia antropológica y ergonómica. Es un objeto que almacena y registra tiempos y espacios. Testigo del paso y el pensamiento humano, construido para ser manejado y que, de alguna manera, le da eternidad al contenido. El libro “es” al leerlo y tiene tantas lecturas como personas que lo leen, explica la artista.

retratodeartista exhibe varias de las series más significativas de Martín. Entre ellas, Monólogos. Una metáfora del auge actual de la imagen en detrimento de la palabra escrita que la artista plasma en un conjunto fotográfico de manos desgarrando un libro. Mientras que en la serie fotográfica Contemporáneos, un cúmulo de libros caen en cascada contra el suelo. Cada uno de ellos representa un tiempo, una época y una forma de entender la cultura. Pero al caer, sus contenidos se dispersan, se suman, se mezclan… Congelados en la caída infinita, pierden su temporalidad, todos son contemporáneos, creando una sensación de contradicción.

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