Existen libros sorprendentes por muchas razones. Por su trama, por sus protagonistas, por vender mucho, por dar origen a películas... y por su tamaño. Porque el libro, además de ser el más maravilloso de los medios de transporte, también es un objeto físico, que puede ser extraordinario y bello, y que como tal, si que no podrá ser superado por los nuevos y tecnológicos e-books.
Y como para muestra vale un botón (en este caso un libro), basta acercarse a la exposición que la Biblioteca Nacional ha organizado con la colección MIMB. Estas cuatro letras esconden la frase "Monumental Ideas in Miniature Books", y son el resultado de la iniciativa de la artista Hui-Chui Ying, quien propuso a quien quisiera aceptar el reto artístico de crear libros como piezas creativas dentro de unas medidas limitadas. La consecuencia fueron 140 piezas en las que la creatividad, como bien dice el título de la muestra, es monumental.
Estupenda manera de volver a dar al libro una importancia que nunca debe perder, por mucho que se valoren y consideren las nuevas tecnologías. Lo cortés no quita lo valiente, y además no hay excusa, que estará abierta hasta septiembre.
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