Arte

Henri Cartier-Bresson

La más completa mirada a la extensa carrera de "el ojo del siglo XX"

Todos miramos el mundo. Es evidente. Como también lo es que cada uno tenemos nuestra manera de hacerlo. Lo maravilloso, lo excepcional, ocurre cuando conocemos un genio que nos hace mirarlo a través de sus ojos de una manera diferente, ya sea describiéndolo en las páginas de un libro, creando melodías, contando historias como cineasta, imaginando con un pincel en sus manos o haciendo fotografías. Tan evidente como que todos miramos el mundo, lo es el hecho de que uno de esos genios que nos hacen mirarlo de otra manera es Henri Cartier-Bresson, quizás el mejo fotógrafo del siglo XX, y que además compartió su pasión detrás de las cámaras con otras disciplinas como el cine, la pintura o el dibujo.

Cuando se cumplen este año una década de su muerte, el Centro Pompidou de París ha organizado una muestra retrospectiva de la figura de quien fue llamado con toda justicia "el ojo del siglo XX". Se trata de la más completa mirada a la extensa carrera de Catier-Bresson, que se dilató durante ni más ni menos que 70 años, y pretende cubrir tanto su faceta (o más bien facetas) profesional como su compromiso social y político. Ahora, y antes de viajar a Italia y México, y tras su paso por el Pompidou, la muestra se puede admirar en la Fundación Mapfre de Madrid, donde permanecerá hasta el 7 de septiembre.

El recorrido, a la vez cronológico y temático, se articula en torno a tres ejes: el periodo comprendido entre 1926 y 1935, marcado por su relación con el movimiento surrealista, sus inicios fotográficos y sus grandes viajes por el mundo. Un segundo escenario está dedicado al compromiso político de Henri Cartier-Bresson desde su regreso de los Estados Unidos en 1936 hasta que volvió a Nueva York en 1946. La tercera secuencia arranca con la creación de la agencia Magnum Photos en 1947, y se extiende hasta principios de la década de 1970, momento en que el autor dejó de realizar fotorreportajes.

La exposición ha sido realizada con la participación de la Fondation Cartier-Bresson. Las obras proceden de más de veinte colecciones internacionales, entre las que destacan la Fondation Cartier-Bresson de París, el Musée d´art Moderne de la Ville de Paris, la Cinémathèque Française, The Art Institute of Chicago, The Metropolitan Museum of Art de Nueva York, MOMA de Nueva York y el Philadelphia Museum of Art.