Wintersleep
Indie

Un dulce pesimismo tiñe el nuevo trabajo de Wintersleep

La veterana banda canadiense acaba de publicar su sexto álbum.

Cuatro años llevaba Wintersleep sin ofrecer al público un nuevo trabajo discográfico. Cuatro largos años en los que la banda canadiense, que ha compartido escenario con grandes nombres como el mismísimo Paul McCartney, los encumbrados Pearl Jam o los ya consolidados The Hold Steady, ha mantenido su personalidad, su independencia y su sonido Tras un largo recorrido de quince años, el grupo cierra el círculo y vuelve a reencontrarse con el espíritu de sus primeras y legendarias grabaciones.

Procedentes de la misma ciudad que los nunca suficientemente ponderados Sloan, Halifax, en la provincia de Nueva Escocia, en Canadá, Wintersleep es una solvente banda de compacto indie rock con tintes de rock alternativo, bien elaborado, sin fisuras, intenso, rocoso y en muchas ocasiones apabullante, ya sea por su sonido o por su fuerte carga emocional. Sus primeros pasos discográficos los dio a través del sello Dependent Music, una compañía discográfica independiente asociada a un inquieto colectivo de artistas que empezó su actividad en el 94 en la localidad de Yarmouth y del que salieron un buen puñado de interesantes artistas como Jill Barber, Brian Borcherdt, Holly Fuck, Land Of Talk o The Motes. Y por supuesto Wintersleep.

Tras un álbum homónimo y otro sin título, Wintersleep fichó con Labwork Music, una discográfica asociada con una multinacional del peso de EMI, y reeditaron su primer LP antes de publicar “Welcome To The Night Sky”, un meritorio álbum cuya importancia se vio recompensada con la obtención en 2008 de un premio Juno (el equivalente canadiense a los Grammy estadounidenses) como Mejor Grupo Del Año. Pero la fama y el éxito no se les subió a la cabeza y los cinco miembros de la banda siguieron trabajando y colaborando asidua y habitualmente con sus compañeros y amigos de los primeros tiempos. En ningún caso perdieron la pasión por la música, algo que han sabido reflejar en todos y cada uno de sus trabajos bajo el nombre de Wintersleep.

Ya en 2009 publicaron “New Inheritors”, su cuarto LP que unos meses más tarde fue editado en Europa y Estados Unidos. De esta forma, la música de Wintersleep traspasaba fronteras y su nombre empezaba a ser conocido más allá de sus frías tierras canadienses. Entre giras y promoción, el grupo trabajando en su siguiente disco durante los viajes, escribiendo los temas en aviones y habitaciones de hoteles. Por eso tardó algo más de llegar, ya que hasta junio de 2012 no salió “Hello Hum”, un disco producido por Tony Doogan, quien ya se había ocupado de esta tarea en su anterior álbum, y Dave Fridmann, conocido por sus competentes trabajos con Mercury Rev, Flaming Lips y MGMT. El resultado final fue excelente.

A principios del verano de 2014, Wintesleep anunció que empezaba a trabajar en su siguiente LP, cuyo proceso de elaboración ha necesitado año y medio. ¿Por qué tanto tiempo? En esos meses la banda despidió al que fue su mánager durante una década y, en cierto modo, sintieron que volvian al principio de todo, a los orígenes. El disco se ha grabado en Halifax, en los estudios The Sonic Temple con su productor habitual, Tony Doogan, tratando de conseguir un sonido sin pulir, descarnado, crudo, muy similar al que muestra la banda en vivo. Para ello recurrieron al viejo método de la cinta, es decir, grabar en una cinta, una vieja cinta, tres tomas de las guitarras, el bajo y la batería de cada canción, elegir la que mejor estaba o la que más les gustaba y añadir nuevas pistas de voces y otros instrumentos, menos importantes y que requerían un tratamiento especial, como por ejemplo pianos de cola, para los que se buscaba un emplazamiento que resaltase su sonoridad, guitarras de 12 cuerdas, lapsteels, coros, etcétera. De hecho, por ejemplo, las voces se grabaron en una cabaña reconvertida en cabina de sonido para tal misión. Las mezclas corrieron a cargo de Gus Van Go y de Werner F (Stills, White Horse, Rah Rah). El resultado final es vibrante y conmovedor, un entorno sonoro perfecto para unas composiciones algo introspectivas que, aunque no se trata de un disco conceptual, sí que tienen un hilo común que teje una trama lírica sobre la separación, el desapego emocional y moral, la supervivencia y el auto-descubrimiento.

A la canción “Amerika” le acompaña un videoclip dirigido por Scott Cudmore y conceptualmente está muy cerca del formato de un corto con el que se transmite una sensación de pesimismo y desencanto frente a la vida cotidiana o al momento extraordinario de un apocalipsis. Bello e inquietante.

 

Lover, don't be sad
Think of the time we have
The moment's truer, now
It won't last

I don't wanna wave goodbye
Shout out a thousand times
I'll love you 'til the moment dies

What am I gonna do?
I can't survive on my Amerika
If the worst is true
Is it just a waste of time?

What am I trying to find?
Are you alive, oh my Amerika?
Perennial with the Earth
And freedom, love, and law, and life
Perennial with the Earth
My freedom, I don't wanna die

Swimming in an unmade cloud
Drinking in a formal gown
You tell me that you love to dance
But you don't know how

It doesn't mean that we can't try
Fix me in your twilight eyes
So we can make a moment last

What am I gonna do?
I can't survive on my Amerika
If the worst is true
Is it just a waste of time?

What am I trying to find?
Are you alive, oh my Amerika?
Perennial with the Earth
And freedom, love, and law, and life
Perennial with the Earth
My freedom, I don't wanna die

Perennial with the Earth
And freedom, love, and law, and life
Perennial with the Earth
My freedom, I don't wanna die.

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